A pesar de todas las dudas que rodean la veracidad histórica del episodio en el que el filósofo griego Arquímedes utilizó un espejo, colocado en una de las torres del puerto de Siracusa, como arma para incendiar los barcos de una flota romana, ellas no impidieron el interés continuo de la comunidad científica.
Entre los jesuitas, el espejo ustorio, o mejor dicho, la propiedade del vidrio para enfocar los rayos de luz y ocasionar combustión, fueron objeto de análisis sucesivas, particularmente después de la publicación, en 1613, de una conferencia de Francisco de Guevara, el alumno español del matemático Christoph Grienberger en el Colegio Romano.
En las décadas siguientes, los espejos de Arquímedes no escaparon a la atención de los jesuitas Athanasius Kircher y Gaspar Schott, sirviendo de telón de fondo para la discusión de la influencia de la forma de las lentes en la concentración y reflejo de los rayos de luz y para la discusión sobre la distancia máxima en la que podría ocurrir este fenómeno.

Al mismo tiempo, los espejos ustorios de Arquímedes fueron introducidos al mundo de emblemas eruditos. En la obra Duodecim Specula, de Jan David, las doce propiedades diferentes de la reflexión se comparan con muchas otras etapas del ascetismo espiritual, en el camino para la salvación del alma. Entre los temas para la meditación de la tercera etapa, el viejo filósofo griego lleva un espejo en sus manos, para la batalla de la luz contra los enemigos de la oscuridad.
La misma idea de los espejos como un arma de gran alcance, ahora contra los enemigos de la fe cristiana, sirvió para ilustrar uno de los emblemas de la obra Imago Primi Saeculi Societatis Iesu, publicada para las celebraciones del centenario de la Compañía, en 1640.
Con el lema Caelestibus armis eminus expugnat [Un arma celestial conquista de lejos], el emblema hace una apología de los talentos oratorios del fundador de la Compañía de Jesús. En esta metáfora, los sermones de Ignacio de Loyola, encendidos por los cielos, son comparables al poder de longo alcance del arma de Arquímedes.
Tanto en los paneles de la aula de Física en el Colégio do Espírito Santo como en el Aula da Esfera, el arma de Arquímedes estableció un puente entre la enseñanza de las ciencias y la exitosa actividad evangelizadora de los jesuitas por todo el orbe.
BIBLIOGRAFÍA PRINCIPAL
BOLLAND, Johannes; TOLLENAERE, Jean de; HOSSCHE, Sidronius de; WALLE, Jacques van de & FRUYTIERS, Philip. Imago Primi Saeculi Societatis Iesu: a prouincia Flandro-Belgica eiusdem Societatis repraesentata. Antuérpia: Balthasaris Moreti, 1640.
MENDEIROS, José Filipe. Os azulejos da Universidade de Évora. Tiles of the University of Evora. Évora: Universidade de Évora, 2002.
2 replies on “La ciencia como arma cristiana”
¡Hola! Este es mi primer comentario aquí, así que solo quería hacer un saludo rápido y decirles que realmente disfruto leyendo sus artículos. ¿Pueden sugerir otros blogs / sitios web / foros que traten los mismos temas? ¡Muchas gracias!
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Obrigado pelas palavras de incentivo. Sobre cada tema abordado, no fim do post, vai encontrar uma ou duas sugestões de bibliografia, na maior parte das vezes disponíveis on-line. Se tiver uma questão específica, podemos tentar ajudar.
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