En un salón de la modesta iglesia parroquial de São Mamede se encuentra un conjunto decorativo que combina los azulejos de las paredes con los frescos en los techos. Con azulejos pintados por Gabriel del Barco y sus colaboradores, el programa repite el de la Iglesia de Santiago, en la misma ciudad, con tres episodios del hijo pródigo, y con otros dos de la vida de Moisés: El Profeta hace brotar el agua de la roca y La serpiente de bronce.
Otros dos paneles definen el tema principal del programa iconográfico, conectado con las funciones del recinto como lugar de encuentro para la hermandad del Santísimo Sacramento. En medio de la pared, el Triunfo de Santo Tomás de Aquino, en gloria con el Santísimo Sacramento, está rodeado por las personificaciones de las virtudes morales de la Esperanza y la Religión y, siguiendo las lecciones de la Suma Teológica, también con los cuatro actos de virtud de la religión: Oración (himno), Contemplación (trigo), Devoción (cigüeña), y Santidad (claves del cielo).

En el lado opuesto, el panel representa a Jesús, en un carro triunfante, con la cruz y la hostia consagrada. Reforzando la secuencia del discurso, una de las personificaciones de los cinco sentidos sostiene una filacteria con un verso del himno de la bendición: Praestet fides supplementum sensuum defectui [La fe suple la falta de nuestros sentidos].
Compuesto para las fiestas del Espíritu Santo, el himno Pange Lingua es parte del ceremonial eucarístico, siendo igualmente cantado cuando la comunión caminaba a la casa de los enfermos, una de las principales tareas de la hermandad.
En el techo, además del tema central de los ángeles en adoración de la Sagrada Eucaristía, están representadas las cuatro virtudes cardinales, fundamentales para la definición del sacramento de la Eucaristía como un camino moral. La combinación de virtudes morales y virtudes espirituales también revela la profunda sedimentación de la ética de Tomás de Aquino que informa el programa iconográfico de la iglesia de San Mamés.
En el techo, cuatro pequeñas cartouches con versos latinos fueron transpuestas en simples emblemas eucarísticos. La Eucaristía es pan y espada (pan y espada); Mis flores son frutos de honor y honestidad (flores); Dondequiera que esté el cuerpo, habrá la unión de las águilas (dos águilas y sol); y el sacramento del amor que se derrama para vosotros (pelícano hiriendo el pecho para alimentar a la camada).
En la parte superior, dos tarjetas con los versos latinos: “Panem angelorum manducavit homo” y “factus cibus viatorum” reanudan la mención de las palabras de los himnos sagrados compuestos por el Doctor Angelicus, en una clara manifestación de coherencia de todo el programa iconográfico, asociando las dos artes decorativas.
BIBLIOGRAFÍA PRINCIPAL
MANGUCCI, Celso. “Sob o império da Retórica. Os programas iconográficos de Santiago e São Mamede de Évora” in Invenire. Revista de Bens Culturais da Igreja, nº 8, pp. 34-47, 2014.